Ezequiel (Profetas) 22: 1-19
Esta semana leemos la Parashat Ajarei Mot, la sexta del libro Vaikrá.
Algunos de los temas desarrollados son: la advertencia a los Kohanim de no entrar al lugar mas sagrado “KÓDESH HAKODASHÍM” sino en el momento adecuado y con la preparación indicada. Habla de lo servicios magistrales que debía llevar a cabo el Kohen Gadol (sumo sacerdote ) en Iom Kipur. Describe las leyes del ayuno de Kipur y la filosofía de este Gran Día. Detalla la prohibición de degollar u ofrecer sacrificios fuera del santuario. La prohibición de ingerir sangre animal y la razón de ello. Aclara la prohibición de pretender asemejarse a las costumbres de los demás pueblos, y suma la prohibición de ciertas relacione íntimas.
En esta oportunidad la Haftará de Ajarei Mot, es una profecía de Ezequiel, en la que relata el derramamiento de sangre por parte de Israel a causa de sus transgresiones (construcción de ídolos, entre otras cosas).
EN esta Haftará el refuerzo del mensaje de la parashá en la Hartará, esta de alguna manera en acentuar el desconocimiento de las leyes planteadas en la parashá.
La parashá nos esta hablando de lo que hay que hacer pero que sucede “ AJAREI”(después)… si tales leyes no se respetan.
La Haftará relata episodios donde se han roto las reglas pactadas, pero tanto en la Parashá como en la Haftará, hay una oportunidad. La parashá habla de YOM KIPUR como el momento de “reparar” y en la Haftará habla de la Gueula, que también llegara cuando AM ISRAEL transite cada YOM KIPUR. La Hartará nos encuentra esparcidos por todo el mundo y degradados. Pero en medio de todo hay una gran esperanza, esa que tendremos que conquistar.
Si en la Parashá nos son dadas mitzvot (leyes) particulares, en la Hartará se nos muestra la condición a la que NO deberíamos haber llegado precisamente por haberlas violado.
La Parashá presenta muchas prohibiciones… y a la vez nos define que siendo
conscientes de nuestra condición, podemos rectificar lo que hemos destruido, y asumir definitivamente la conexión inquebrantable que tenemos con la Luz del Creador.
En esta semana, la PARASHA y la HAFTARA están ESPEJADAS.
La PARASHA y la HAFTARA se completan y se explican la una a la otra.
Al principio de la Parashat AJAREI MOT se recuerda la muerte de los dos hijos de Aarón, por llevar ante HAshem un fuego extraño. Aquella ofrenda no pedida por Hashem les consumió.
Moisés en ese momento, justo después del incidente, habló con su hermano Aarón pero no le dio ninguna de las instrucciones con las que nos encontramos esta semana. ¿Por qué aquel fuego mató a Nadab y Abihú? ¿Por qué Moshé no
advirtió en aquel instante a Aarón sobre el peligro de acercarse a la parte más sagrada de la tienda?
Moshé esperó.
Porque Hashem le habló a Moshé en AJAREI MOT.
Esperó. Esperó. hasta que un día, al final, explicó a Aarón que NO debía atravesar la cortina en cualquier momento: únicamente el día de Yom Kipur, de determinada manera y con vestimentas específicas ( para expiar por los pecados de Israel).
(el versículo advierte “no es posible entrar -be’jol et – ”en cualquier momento”)
Por qué?
Porque existe “el instante propicio”.
Moisés omite hablar con Aaron en ese momento. Prefiere esperar para dar a conocer la información, porque existe “el instante propicio”. Porque espera a que sea un tiempo adecuado y preciso para su hermano.
Si conocemos las reglas, sabremos exactamente cual es el momento adecuado.
Las reglas están disponibles, no esperemos un “DESPUES”/AJAREI… MOT.
SHABAT SHALOM UMEBORAJ.
Silvia Dvoskin