HAFTARA RehE – ראה
Ishaiahu (Isaias) 54:11 – 55:5
(ensayo)
“… Ninguna arma forjada contra ti prosperará… Ésta es la herencia de los siervos de IHeiVavHei” (54:17)
Como sucede en todas las Haftarot, lo que leemos son extractos de Profesías escritas por los mismos profetas, que se encuentran en la sección de NeVIHIM del Tanaj. El texto elegido esta siempre relacionado con la Parasha de cada semana, por el sentido del relato y
es el que leemos después de la lectura de la Parasha en Shabat o en Jaguim
En las siete semanas posteriores a Tisha B’Av leemos una serie de haftarot del libro de Isaías que se enfocan en temas de consuelo. Siete semanas de Alivio… calma, tranquilidad, serenidad.
Siete semanas hasta Rosh Hashana. Un ciclo completado por siete etapas siendo aquí donde, y ahora cuando, comienza el momento de restauración.
Es en este momento cuando llega el tiempo de comenzar a MIRAR hacia adelante. Es ahora cuando hay que recuperar el aliento, reconstruir la serenidad y definir un plan, y entonces si, concentrarse en “actuar”.
ISHAIAHU desarrolla profecías optimistas.
En esta oportunidad el Profeta ISHAIAHU evoca y destina sus palabras a consolar a una nación que acaba de llorar por la destrucción de su espacio de encuentro sagrado, por la ruptura, por el egoísmo, por la muerte.
La profecía de Isaías en la selección de haftarah para Reeh se enfoca en cómo este pueblo de Israel se levantará una vez más a la gloria. Sus edificios serán hechos de piedras preciosas, sus hijos serán criados en paz y sus ciudades estarán seguras. D’s les recuerda su poder, ningún daño les puede sobrevenir sin su consentimiento. Si Él decide que serán fortalecidos y restaurados, esto sucederá. ISHAIAHU promete que el pueblo de Israel será invencible.
Como?
Esto es así? solo así?
Porque habrá que hacer un trabajo. Cuál trabajo?
Lo define la Parashá. MIRá. REHE.
Habrá que aprender a MIRAR. Esta es la propuesta de esta Parashá. Aprender a MIRAR…
Aprender a identificar donde esta la “bendición” y donde esta la “maldición”.
Porque la LUZ es simple, es UNA. Hashem es UNO.
La bendición y la maldición dependerá de lo que cada uno de nosotros apreciará lo que tenga enfrente… en frente… en SU FRENTE
Todo indica que en adelante, si hemos aprendido que provocó la oscuridad y el dolor que nos afecta, podremos restaurar ese orden.
Este es el momento de restablecer. Haber transitado tres semanas de Bein Hametzarim, fueron necesarios para poder estar ahora reprogramando lo que se viene.
Y Este momento es posible, porque todo lo que hemos pasado SOLO sucedió por un solo motivo y es, para estar AHORA AQUI, EN ESTE MOMENTO.
Todo lo que ocurrió era absolutamente necesario.
AHORA ESTAMOS LISTOS PARA RECONSTRUIR.
Es el momento exacto.
Porque restaurar y rearmar lo que se viene, depende exclusivamente de COMO recordemos lo que pasó hasta ahora. Si podemos aprender y comprender eso que pasó, si aceptamos el presente como FRUTO del pasado entonces, podremos encontrar calma y fuerza.
Pero sí recordamos lo que pasó con enojo y frustración no podremos escalar.
Sí cuando miramos para atrás vemos el camino con rencor y resentimiento, no tendremos el suficiente coraje que hace falta para reedificar.
Tan grande será ese peso que no nos permitirá subir.
Y quedaremos en el llano.
Este es ese MOMENTO DE OPORTUNIDAD.
Hay que salir y retomar el proyecto.
Hay que salir a restaurar.
Porque esta Parashá trae esa energía.
La de saber ver lo que sucede.
Porque eso que PRESENTO ante Ti, eso que esta frente tuyo es LAS DOS COSAS. es BENDICION Y ES MALDICION… cada uno elige
Eso UNICO que hay es, LAS DOS COSAS, y solo depende de donde este TU MAKOM… donde estes parado… de cual se a tu punto de vista.
Porque todo esta lleno de ENERGIA POTENCIAL y será por tu propio criterio que eso se convertirá en bendición o maldicion
Lo que tenes ahora es lo que retenes que tener como consecuencia de lo que hiciste. DE vos depende si es MALDICION O SI ES BENDICION
La pregunta sigue tan vigente como hace 25 siglos.
Donde encuentro esa calma, esa serenidad?
La respuesta nos recuerda un comentario del rabino Jacques cuando pregunta: ¿Qué tan lejos esta D’s de nosotros? “Esta tan lejos como el este del oeste”.
Shabat Shalom Umeboraj
Silvia Dvoskin