No se si a vos también te pasa, que cuando alguien te despierta, te querés a volver a dormir. Pero cuando te despertás por la tuya, no te volvés a dormir,al menos por un rato.
Bueno, esta semana pareciera que pasó algo. Estamos en la parashá “Ki Tisa”, pasan realmente una banda de cosas pero hay una principal. Moshé, que le había dejado todo el boliche tranquilo a Aharon, baja y ve que Aharon tiene el boliche descontrolado y que además armaron un becerro de oro y le ofrendan más que a la pachamama. A Moshé se le suelta la cadena y rompe las tablas de la ley (los diez mandamientos) que el mismísimo D´s había pensado, escrito, grabado y entregado. Tiene que volver a subir, pero esta vuelta hay una diferencia, las tiene que escribir Moshé (obviamente, mientras D´s le tiraba letra).
Pero el tema central acá es lo que algunos místicos llaman “Itaruta De Leila” (Despertar de arriba) e “Itaruta De Letata” (Despertar de Abajo). Vamos a explicarlo de la manera más sencilla: Lo que te dieron, te fue dado o ligaste de arriba vs lo que te pasó, lo que te ganaste, lo que te esforzaste o te atravesó. Dicen que el despertar de arriba puede cambiar la naturaleza pero no cambia lo humano. Cuando no hay esfuerzo somos pasivos. Algo de arriba o cercano nos puede abrumar, pero a la larga volvemos. Es como cuando te enterás que le pasó algo a una persona conocida, te preocupas pero a la noche ya estás en la tuya. Y algo muy distinto es la conciencia cuando algo le paso a uno. Cuando uno despierta de abajo, la marca queda. Es un despertar de la capacidad, una vez que sabés que lograste algo por tus propios medios sos consciente de tu fuerza y tu posibilidad de lograrlo nuevamente.
El primer despertar (el de arriba) cambia al mundo, el segundo (de abajo) a nosotros mismos.
Nuestra tradición nos enseña que lo natural está por encima de lo sobrenatural. Despertar de abajo es más poderoso que un despertar de arriba porque nos transforma. La intervención divina cambia la naturaleza, el despertar humano cambia la esencia.
Shabat Shalom!
Wally Liebhaber