Shemot 10:1-13:16.
Sin lugar a duda esta, es claramente la Gran parashá de la “Libertad”.
¿Qué significa de Libre?
¿Qué Necesita un pueblo para ser Libre?
“El diccionario nos define que libre, se refiere a quien tiene libertad, es decir, aquella persona que tiene la posibilidad de tomar decisiones y llevar a cabo una acción sin imposiciones externas.”
Entonces pregunto ¿somos libres por que Moshé nos liberó del Faraón?
Claramente la respuesta es “NO”.
Entonces vamos a tratar a responder la segunda pregunta. Moshé nuestro gran líder, nos va mostrar en tres versículos, dentro de esta parashá, que la herramienta fundamental para conseguir la libertad es la educación. Así veremos, como se refirió al mismo tema: hablando sobre los niños, la educación y el futuro distante.
“Y cuando tus hijos te pregunten “¿Qué significa este ritual?” les responderás: “Es el ritual de Pesaj de
sacrificio para el Señor, porque Él salteó las casas de los israelitas en Egipto cuando golpeó a los
egipcios, pero salvó nuestras casas.” (Éxodo 12:26-27)
“Y le explicarás a tu hijo en ese día: Es por lo que el Señor hizo por mí cuando me liberó de Egipto.”
(Éxodo 13:8)
“Y cuando, en el tiempo en que eso ocurra, tu hijo te pregunte “¿Qué significa esto?” le dirás: “Fue
con mano fuerte que el Señor nos sacó de Egipto, de la casa de la esclavitud.” (Éxodo 13:14)
Es uno de los actos más inspiradores, de la historia del liderazgo. Moshé no habló de hoy o de mañana.
Habló del futuro distante.
En la tradición judía, debemos incentivar a los niños a hacer preguntas, de tal manera que el manejo de la herencia judía no sea un aprendizaje de memoria, sino que resulte del diálogo activo entre padres e hijos. Por todo esto, el judío fue el único pueblo de la historia que predicó su supervivencia en base a la educación. El deber más sagrado de los padres es enseñar a sus hijos.
Pensemos en los rituales y los mensajes que nos ofrece el Seder de Pesaj, claramente la Hagada es un modelo de rituales que están destinados esencialmente a la educación. Es más, no solo para los hijos, para nosotros los padres también. De hecho, es muy común para aquellos que nos gusta armar grandes mesas, para la festividad de Pesaj, y que siempre tenemos invitados, en cada familia siempre hay parientes que no tienen mucha instrucción sobre Pesaj. Es nuestra obligación explicarles con lujo de detalle durante el Seder todos los símbolos que tenemos sobre nuestra mesa y contarles la historia del sucedido.
Pesaj se transformó en un seminario continuo en el traspaso de la memoria. El judaísmo se transformó en la pueblo en la que sus héroes son maestros y cuya pasión es el estudio y la vida de la mente.
La introspección de Moshé fue profunda. Sabía que no se puede cambiar el mundo solo mediante lo
externo, como la arquitectura monumental, los ejércitos o los imperios, o el uso de la fuerza o del poder.
¿Cuántos imperios han nacido y han desaparecido, mientras que la condición humana permanece sin
transformación ni redención?
Hay una sola manera de cambiar el mundo, y es mediante la educación. Es necesario enseñar a los niños la importancia de la justicia, la rectitud, la bondad y la compasión. Debes enseñarles que la libertad solo puede sustentarse por las leyes y la práctica de autocontención. Es necesario recordarles constantemente las lecciones de la historia: “Fuimos esclavos del Faraón en Egipto” porque los que olvidan la amargura de la esclavitud podrán perder el compromiso y el coraje de luchar por la libertad.
Es por eso mis queridos amigos que la educación es la herramienta fundamental para mantenernos vivos como pueblo. Es obvio que en las enseñanzas de Moshe Rabeinu con respecto a la educación de los hijos se refiere a nuestros hijos, pero nos incluye a nosotros también todos somos Benei Israel, hijos de Israel.
Los invito a seguir estudiando, no importa cuanto sepamos, nunca sabemos lo suficiente y todos los días aprendemos algo nuevo. Como nos enseña el Pirkei Avot 4:5 “Rabí Ismael, hijo de Rabí Yossei, diría: Quien aprende Torá para enseñar, tiene la oportunidad de aprender y enseñar. Quien aprende para hacer, tiene la oportunidad de aprender, enseñar, observar y hacer.”
Shabat shalom humeboraj.
Ari A. Alster