Haftará Parashá Bejukotai
Shabat, 24 de Iyar, 5784
Sábado, 1° de junio, 2024
Jeremías (16:19 – 17:14)
La parashá de esta semana Bejukotai, que significa “Mis Estatutos”, se encuentra en él final del libro de Vaikrá (Levitico). Dicha porción, se combina con la Haftará del Profeta Jeremías 16:19 y 17:14.
Sus profecías se refieren a la época del Reino de Judá. En ese tiempo, no eran observadas las leyes de HaShem. Con su palabra, Jeremías expone castigos a quienes las ignoran y otorga bendiciones a quienes continúan según las normas establecidas.
El pueblo de Israel había perdido su fe. 16:19 “…Oh Señor, que eres mi poder y mi fuerza y mi refugio en el día de la angustia, a ti vendrán naciones desde los confines de la tierra y dirán: “Sólo mentiras nos han transmitido nuestros padres, vacío en el que hay ¡De nada sirve!…” Se habían vuelto idólatras. 16: 20 “…¿Puede un hombre hacerse dioses para sí y no son dioses?…”
16: 21 “… en este tiempo les haré saber Mi poder y Mi fuerza, y sabrán que Mi Nombre es el Señor…”
Por eso, el castigo para el reino sería su destrucción y el exilio.
La falsa sensación de seguridad imperante en esos tiempos, les hacía suponer que las profecías de Jeremías nunca serián cumplidas.
¿Será entonces, que luego de sufrir esas penurias, el pueblo de Israel aprendió de sus errores?
Normalmente decimos que uno debe aprender de sus errores. Que si se desconoce la historia, esta vuelve una y otra vez a repetirse.
La seguridad que tenemos hoy en día, es muchas veces falsa. Creemos que poseemos el poder de dirigir nuestras vidas, por caminos que sabemos son equivocados. Aunque igualmente lo hacemos, la auto determinación de mentirnos, lastima a los que más queremos, perdiendo así la oportunidad de actuar con racionalidad.
De nada sirve guiarnos por la ira, el odio o la venganza, porque el fin nunca justifica los medios.
Lamentarse luego de nuestras acciones y gratificándonos en consecuencia con adquisiciones o pensamientos superfluos, nos deja más vacíos. Criticar las decisiones de terceros, opinar desde afuera es aún peor.
La cordura y la razón van de la mano. Si nos unimos, a pesar de las diferencias y la adversidad, podemos salir adelante, en aras de un bien común.
Los ojos del corazón, se encuentran en nuestro interior, solo hay que tratar de buscarlos. Seremos de esta forma, un ejemplo de humildad para la nueva generación. Solo es cuestión de tiempo para obtener buenos resultados.
A pesar del desánimo de creer que el mal puede triunfar, este cae por su propio peso. Si logramos hallar en nuestro interior la verdad y la justicia, podremos obtener el camino correcto.
Es hora de abrazarnos. Que enfrentemos las voces intransigentes del planeta.
Que todo nuestro pueblo es solo uno, no importando donde se encuentre. No van a volver a dejarnos sin voz. Gritemos al unísono que estamos orgullosos de ser lo que somos. No seamos cómplices en el silencio, por miedo al que dirán.
Ya habrá tiempo de solucionar nuestros problemas internos, hoy no es el momento oportuno.
Ahora solo debemos enfocarnos en encontrar la luz que brilla al final del túnel.
Te propongo entonces, que este Shabat busques en tu fuero interno, la voz de la justicia que necesitamos para encontrar paz y bienestar en Israel.
Shabat Shalom
Susy Lapilover
# Bring them home now #
Am Isarel Jai